martes, 9 de febrero de 2010

El silencio es una constante en los abandonos.




Ir y adentrarse en una cada abandonada tiene su miga, no sabes que es lo que pasara a cada paso que das, el suelo puede estar podrido, el techo puede caer, puede haber animales....



El impulso a investigar, la curiosidad, la adrenalina, esos son los alicientes que consiguen que cada paso se este un poco más dentro y que lo que veas parezca un gran tesoro, incluso si no encuentras nada el simple hecho de estar en esa estancia vacía.



Objetos cotidianos de otrora te transportan a un tiempo olvidado que contrasta con el actual y no por el polvo que se acumula encima sino por que era mas austero todo y las soluciones a los mismos problemas tenian formas mas arcaicas.






Siempre se sienten los fantasmas del pasado aunque no les hagamos caso hasta estar más bien lejos.



Incluso la luz, parece perdida y ausente, como menos intensa a través de un velo de años de abandono, como si la luz también abandonase esa estancia.













-"El bosque es un lugar demasiado oscuro y profundo, tengo promesas que cumplir y mucho que viajar antes de poder dormir".
-Death proof-

No hay comentarios: